miércoles, 18 de noviembre de 2009

NOTA


Suelo tardar en publicar, espero que de ahora en adelante sea mas amenudo, desde que escribí este último artículo pasó algo de tiempo, ya que las fiestas del Portal son el 8 de Septiembre, espero no repetir tanto lapsus, aún así lo he publicado porque tenía que hacerlo.

S O S FIESTAS DEL PORTAL


Nunca pensé que llegaría a verlo, la gran Ribadavia la que tanto presume la que vive en el abolengo y la fama de antaño y que hace tiempo que está en su apogeo, no hace falta mas que mirar sus fiestas del Portal, sin mencionar la sonada fiesta del vino porque eso ya es historia je, pues como iba diciendo las grandes fiestas del 8 de Septiembre, que no fueron ni dignas de mencionar, con decir que la fiestas de mi pueblo tienen mas chiringos y cosas que las de este año en el Portal, las atracciones se fueron al segundo día los tenderetes ni aparecieron una tristeza, seis días de fiesta y entre todos ellos no hacen uno bueno, y digo yo, porque no hicieron menos días y traer pues no se una orquesta cada día sin traer chuminadas , bueno Mclan para quien le guste esta bien.
Que recuerdos aquellos en los que venían dos o tres conciertos que llenaban la villa de gente, pasaron desde Barón Rojo, Medina Azahara, Marta Sánchez, Sergio Dalma, Amistades Peligrosas, Luar na Lubre…. osease un sinfín de actuaciones que iban con los tiempos y los tenderetes llenos de cosas, los fuegos de colores a mansalva, todo en su justa medida. Carballiño les deja a años luz, y con todo parece decirle a Ribadavia donde puede meterse su Historia y , otra villa, Chantada, que a pesar de ser una villa de “campo”, sin abolengo e historia, ha crecido mucho más que Ribadavia, tiene unas fiestas fantásticas, con una tirada de fuegos artificiales que supera cada año.
Fiestas de Monforte de Lemos 2006 pude asistir al concierto de Mägo de Oz en la Plaza Mayor y GRATIS.
Déjense de chuminadas y hagan las fiestas como tienen que ser, fuegos, orquestas, tenderetes y atracciones para los niños, en vez de una semana pues tres días como toda la vida, que son las últimos del verano que disfrutan antes de enterrar la cabeza en las mates y otros derivados